Luego las plagas y las revueltas. En apenas unos años, la humanidad sufrió todos los desastres imaginables, y solo fueron el preludio de algo aún peor que estaba a punto de ocurrir. Primero fue el terremoto. Después, vino la guerra. Allá dond. Cuando cazaban a algún infeliz, desollaban su cadaver y se hacían un traje con su piel. Un ejército de demonios surgido literalmente de las entrañas del infierno, masacrando a los pocos supervivientes que encontraron entre las cenizas. Algo inimaginable.
más información...